El 1 de abril de 2004, Google revolucionó el correo electrónico con el lanzamiento de Gmail.
Gmail no era entonces el único proveedor de correo electrónico -Hotmail y Yahoo! Post existían desde hacía años-, pero el servicio de Google ofrecía acceso web, mayor velocidad, organización automática del correo electrónico, funciones de búsqueda integradas y 1 GB de almacenamiento, lo que supuso un gran paso adelante en el almacenamiento personal en la nube en aquella época.
En un comunicado de prensa, Google se jactaba de que el gigabyte de almacenamiento «era más de 100 veces» la cantidad ofrecida por los competidores y anunciaba el acceso gratuito, que en aquel momento parecía una broma del Día de los Inocentes.
Desde entonces, sabemos que se puede pagar por los servicios digitales con algo más que dinero — en el caso de Gmail, a los usuarios se les cobraban datos como agradecimiento. El software del servicio podía escanear el contenido de los correos electrónicos de los titulares de las cuentas y utilizar esta información para mostrarles anuncios personalizados en la barra lateral del sitio. Para bien o para mal, era un planteamiento innovador.
Durante los cinco primeros años, Gmail estuvo disponible en versión beta por invitación. Cuando el servicio se hizo público el 7 de julio de 2009, tenía más de 100 millones de usuarios — y unos años más tarde, Google, que había mejorado su herramienta de detección de spam a gusto del público, informó de 425 millones de usuarios activos. Gmail se convirtió oficialmente en el mayor servicio de correo electrónico del mundo.
En sus 20 años de existencia, Gmail se ha convertido en el principal servicio de correo electrónico para una cuarta parte de la población mundial — hoy, según AndroidPolice, lo utilizan 2.000 millones de personas. Google ha anunciado que integrará Inteligencia artificial Gemini así que es interesante ver de qué logros presume Gmail en su 30 aniversario.