La nueva gama Audi A3, presentada esta semana, estará disponible con una serie de características basadas en la suscripción. Tras la compra del coche, los propietarios podrán adquirir opciones adicionales de confort y contenidos de infoentretenimiento a través de la aplicación myAudi.
Entre estas funciones de suscripción de pago se encuentran el control de crucero adaptativo, el asistente de luces de carretera y una interfaz para smartphone que permite el uso de Apple CarPlay y Android Auto a través del sistema de infoentretenimiento. Incluso la función de climatizador bizona será ahora una opción de suscripción de pago.
Los propietarios de los coches (si es que todavía es posible utilizar este término para los clientes que tienen que pagar una suscripción para acceder a las funciones) podrán elegir durante cuánto tiempo quieren utilizar las funciones de pago. El fabricante señala que pueden activarse durante un mes, seis meses, un año, 3 años o para siempre, en función de las necesidades. BMW ya probó una vez este truco con asientos calefactados por suscripciónpero más tarde se vio obligado a abandonar esta idea.
En teoría, el acceso a las funciones de suscripción permitirá a algunos clientes reducir el coste medio de propiedad del coche. Por ejemplo, si sólo hacen un viaje largo dos veces al año, pueden activar el control de crucero adaptativo o la navegación por satélite sólo cuando lo necesiten, y no pagar por ello el resto del tiempo cuando no lo necesiten. Sin embargo, los clientes pueden pensar que les están cobrando dos veces por el mismo producto porque el equipamiento de las funciones bloqueadas ya está instalado en el coche que venden.
El precio de la berlina Audi A3 en Europa empieza en 36450 euros.
Fuente: carbuzz