La ciudad amurallada de Arabia Saudí se está convirtiendo en un desastre financiero — su construcción durará 55 años y costará $8,8 billones

La futurista ciudad amurallada de Neom, en Arabia Saudí, se está convirtiendo en un grandioso fracaso en lugar de ser una ciudad ecológica del futuro.

Este gigantesco experimento urbano en el desierto se enfrenta a increíbles sobrecostes, retrasos y problemas logísticos. Ya se han gastado más de 50.000 millones de dólares, pero la mayor parte de la infraestructura sigue en fase de planificación o de construcción inicial.

Según una auditoría interna presentada al consejo de Neom, la construcción podría durar al menos 55 años. El coste final del proyecto alcanzará los 8,8 billones de dólares, lo que equivale a 25 veces el presupuesto anual de Arabia Saudí. La cantidad es absolutamente irreal incluso para un país con semejantes recursos.

Según los planes originales, en medio del desierto iban a crecer enormes rascacielos, una estación de esquí, un distrito comercial flotante, ríos artificiales y tecnología hipermoderna. La muralla debía extenderse a lo largo de 170 km y tener 500 metros de altura. Pero la ambición se vio truncada por unas expectativas poco realistas. El proyecto se convirtió en una de las diez utopías urbanas futuristas.

¿Qué falló en la construcción de Neom?

La realidad es que a principios de 2025 sólo estarán listos los cimientos. Y las empresas constructoras dudan de que se puedan construir rascacielos de esta forma.

• Los costes se multiplican — Por ejemplo, el primer barrio de baja altura de Sindalah debía costar 1.300 millones de dólares, pero acabó costando 3.900 millones
• Opacidad financiera — una auditoría interna reveló «una manipulación deliberada de» las previsiones financieras para justificar el aumento de los costes
• Escasez crítica de mano de obra — la construcción es lenta porque la región carece de trabajadores suficientemente cualificados
• Falta de infraestructuras — no hay carreteras suficientes, el suministro eléctrico y la logística se complica notablemente
• Clima desértico — El clima complica la construcción, y las masas de agua artificiales requieren aún más inversión financiera
• Retrasos y caos — El complejo turístico de Sindalah lleva tres años de retraso, y su inauguración costó 45 millones de dólares. Ni siquiera el club de golf funciona, y no hay visitantes en los restaurantes

Hablando del complejo de lujo Sindalah. La primera parte de la ciudad futurista se inauguró en octubre de 2024. Muchas estrellas fueron invitadas al evento, como Tom Brady, Will Smith, Alicia Keys y otros. Sin embargo, el príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohammed bin Salman, no apareció en persona. Muchos tomaron su gesto como una señal de desconfianza en la gestión del proyecto.

Se esperaba que Sindalah fuera la primera parte comercial de Neom. Pero, como ya se ha dicho, el hotel está inacabado, el club de golf cerrado y los transbordadores no han podido operar debido a los fuertes vientos.

Mientras Neom está en crisis financiera — hay quien gana millones

Lo más interesante de esta historia es que todavía hay quien gana mucho dinero con el fracaso de Neom. La consultora McKinsey & Co. recibe más de 130 millones de dólares anuales por la planificación de proyectos y previsiones financieras. Llama la atención que el informe identificara «la manipulación deliberada» las previsiones financieras como uno de los problemas de la construcción. Pero el hecho es — McKinsey & Co. recibe sus millones, mientras que el propio megaproyecto está estancado en la crisis.

¿Se completará la futurista línea urbana?

Se suponía que Neom iba a ser la respuesta de Arabia Saudí a Dubai: una ciudad futurista que mostrara el poder de la tecnología y el petróleo. Pero, de momento, parece otro gigantesco fracaso financiero, con muchos miles de millones gastados sin ningún rendimiento real. Además, los expertos dudan de que los inversores acepten financiar Neom, dada su falta de transparencia y sus problemas de ejecución.

Fuente: The Wall Street Journal