Lanzamiento del Starliner hace una semana se detuvo debido a una válvula de oxígeno defectuosa. Sin embargo, resultó que la nave tenía otros problemas.
El martes, Boeing anunció que el primer vuelo del Starliner con la tripulación se posponía al 21 de mayo — la misión debía comenzar el 6 de mayo, pero se detuvo debido a una anomalía con la válvula de oxígeno del cohete Atlas V de la United Launch Alliance (ULA). Finalmente, el equipo la sustituyó, pero los expertos encontraron otro problema con una «pequeña fuga de helio».
«El equipo del Starliner está trabajando para reparar una pequeña fuga de helio encontrada en el módulo de servicio de la nave», dijo Boeing en un comunicado. «La NASA y Boeing están desarrollando soluciones operativas para abordar el problema».
El objetivo de Boeing es convertirse en la segunda empresa privada en proporcionar transporte de tripulación hacia y desde la ISS (el contrato con la NASA está valorado en 4.300 millones de dólares), junto con SpaceX. La empresa de Elon Musk llegó a la estación por primera vez en 2020 con su cápsula Dragon, poniendo fin de hecho a casi una década de dependencia estadounidense de los cohetes espaciales rusos.
Inicialmente, el primer vuelo de prueba del Starliner sin tripulación estaba previsto para 2015, pero finalmente se pospuso durante 4 años. Finalmente, cuando tuvo lugar el lanzamiento, fallos en el software hicieron que los motores se reiniciaran — la nave consumió demasiado combustible y nunca llegó a la ISS. El segundo intento, originalmente previsto para agosto de 2021 pero que no se lanzó hasta mayo de 2022, fue en general un éxito — aunque hubo algunas dudas sobre el rendimiento de ciertos motores y el sistema de refrigeración del Starliner.
Finalmente, cuando el Atlas V con el Starliner tripulado alcance la órbita, la nave espacial encenderá sus propios motores y debería llegar a la estación espacial en 24 horas. Los astronautas Butch Wilmot y Suni Williams pasarán allí alrededor de una semana, mientras la nave espacial permanecerá acoplada a la ISS. Después, volverán a casa a bordo del Starliner, que se espera que caiga en paracaídas en uno de varios lugares designados del suroeste de Estados Unidos.
Fuente: Gizmodo
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