Científicos ucranianos han ideado una interesante solución a uno de los problemas más acuciantes de la exploración espacial: cómo transportar personas a Marte de forma segura investigación propone utilizar viajeros espaciales naturales — asteroides — como vehículos interplanetarios.
El viaje tradicional a Marte plantea importantes retos. Con una distancia media de 225 millones de kilómetros desde la Tierra, un viaje convencional de ida y vuelta duraría aproximadamente tres años, exponiendo a los astronautas a graves riesgos para la salud. La exposición prolongada al espacio puede provocar atrofia muscular, pérdida de densidad ósea, problemas cardiovasculares y una peligrosa exposición a la radiación.
Sin embargo, los investigadores Arseniy Kasyanchuk y Volodymyr Reshetnyk, de la Universidad Nacional de Kiev, han encontrado una posible solución mediante un análisis exhaustivo de más de 35.000 asteroides cercanos a la Tierra (NEA). Su estudio, que abarca el periodo comprendido entre 2020 y 2120, identificó 120 candidatos prometedores que podrían servir como naves espaciales naturales entre la Tierra, Marte y Venus.
Estos «transbordadores espaciales» podrían reducir potencialmente el tiempo de viaje hasta en 180 días, lo que reduciría significativamente los riesgos para la salud de los astronautas. Los asteroides también podrían aportar beneficios adicionales: sus cavernas y superficies naturales podrían servir como escudos contra la radiación cósmica, y los propios asteroides podrían convertirse en una fuente de recursos para los viajeros espaciales.
Misión NEO Surveyor de la NASA
NASA NEO Surveyor es una misión espacial desarrollada por la NASA para detectar y rastrear Objetos Cercanos a la Tierra (NEO), como asteroides y cometas, que podrían suponer un peligro potencial para la Tierra. El objetivo principal de la misión es identificar objetos de más de 140 metros de tamaño que se encuentren en órbitas que podrían intersecarse con la órbita de la Tierra. El lanzamiento de NEO Surveyor está previsto para 2028, que pretende detectar más del 90% de todos los objetos cercanos a la Tierra con un diámetro superior a 140 metros, puede ampliar considerablemente la lista de posibles portadores de «espaciales. Esta investigación abre nuevas posibilidades para futuros viajes interplanetarios al ofrecer un enfoque más ecológico y rentable de los vuelos espaciales.
Sin embargo, la aplicación práctica del concepto requiere resolver al menos dos tareas críticas: desarrollar una tecnología para aterrizar en un asteroide, así como crear métodos para penetrar con seguridad en su superficie.
Fuente: Universetoday
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