Charge Cars, una empresa que intentó crear una versión eléctrica del Mustang del 67, quiebra. A pesar de contar con una licencia oficial de Ford y una cobertura de prensa positiva, la empresa quiebra.
Charge Cars ’67 es esencialmente una copia eléctrica del Ford Shelby Mustang de 1967. El coche iba a estar equipado con un paquete de baterías instalado en el suelo, una nueva carrocería de acero, un interior moderno y un propulsor de 536 caballos (400 kW) con 1500 Nm de par. Ford incluso concedió a Charge Cars una licencia para fabricar piezas internamente.
El único problema es que la empresa nunca fue capaz de encontrar compradores para el Mustang eléctrico del 67. Al parecer, Charge Cars nunca fue capaz de producir una sola versión de producción del coche. Probablemente, los clientes interesados se asustaron por el precio fijado de 350.000 libras (más de 440.000 dólares). Incluso los compradores adinerados perdieron interés por este motivo.
«Al igual que muchos otros en la industria de vehículos eléctricos, nos hemos enfrentado recientemente a serios desafíos. Por lo tanto, es con profundo pesar que le informamos que a partir del 31 de mayo de 2024, Charge Cars Ltd («Empresa») ha sido puesta en administración. Mark Smith y Stephen Cork de Cork Gully LLP han sido nombrados administradores conjuntos para administrar los asuntos, negocios y propiedades de la Compañía»», reza el comunicado.
Charge Cars es un ejemplo de lo difícil que es triunfar en la industria del automóvil hoy en día. Y la situación de la empresa puede ser una buena lección para otras marcas con aspiraciones similares. Sin embargo, Charge Cars cree que no todo está perdido y que el 67 tiene futuro.
«Creemos sinceramente que este no es el final del 67, y buscamos todas las oportunidades para volver a la senda».
Fuente: carscoops
Spelling error report
The following text will be sent to our editors: