Científicos chinos han desarrollado un nanosensor que detecta el cáncer de pulmón por el nivel de isopreno en el aire que exhala una persona.
Los investigadores creen que su descubrimiento podría conducir a la creación de un método no invasivo y barato de diagnóstico precoz de la enfermedad, lo que podría salvar muchas vidas.
Cuando el cuerpo humano descompone la grasa en un proceso denominado metabolismo lipolítico del colesterol, isopreno se libera con el aire exhalado. Resulta que una disminución de los niveles de isopreno puede indicar la presencia de cáncer de pulmón. El equipo, dirigido por investigadores de la Universidad de Zhejiang (China), utilizó este conocimiento para desarrollar un innovador material sensor de gases con el que crear un proceso de detección.
El principal reto del descubrimiento de biomarcadores
Los investigadores trabajaron en la mejora de nanosensores basados en óxido de indio que cumplieran estos criterios. Tras varios experimentos, obtuvieron un tipo de material de óxido metálico que contiene platino (Pt), indio (In) y níquel (Ni), al que denominaron Pt@InNiOx.
El material Pt@InNiOx demostró ser ultrasensible y detectó niveles de isopreno tan bajos como dos ppb. Además, respondió mejor al isopreno que a otros compuestos presentes en el aire exhalado humano y su rendimiento fue constante durante las pruebas.
Estas pruebas consistieron en incorporar las nanoesquirlas de Pt@InNiOx a un dispositivo portátil que los científicos utilizaron con muestras de aliento de 13 participantes, cinco de los cuales padecían cáncer de pulmón. El sensor detectó niveles de isopreno inferiores a 40 ppb en las muestras de los participantes con cáncer y superiores a 60 ppb en las de los participantes sin cáncer.
Ventajas datos Según la Organización Mundial de la Salud, 1,8 millones de personas morirán de cáncer de pulmón en 2020. Un nuevo método de diagnóstico puede reducir considerablemente esta cifra gracias a la detección precoz de la enfermedad.
Vale la pena señalar que el artículo de los investigadores, publicado en la revista ACS Sensors, refleja los resultados de un grupo de pruebas bastante reducido. El equipo señaló que aún queda trabajo por hacer antes de que este método de detección esté disponible comercialmente: investigar los materiales de los sensores, realizar nuevos análisis de datos, integrar la tecnología en dispositivos portátiles y seguir explorando la relación entre el isopreno exhalado y el cáncer de pulmón.
Otros proyectos sobre diagnóstico del cáncer basado en el aire exhalado llevan varios años desarrollándose. En 2019, Cancer Research UK iniciado La investigación se llevó a cabo, pero no parece que se hayan publicado aún los resultados.
Fuente: New Atlas