A principios de año, el tribunal reconoció a Google como monopolio de las búsquedas y, desde entonces, los reguladores han estado estudiando cómo superar las prácticas anticompetitivas de la empresa.
Según el Bloomberg, el Departamento de Justicia de EE.UU. propuso al tribunal obligar a Google a vender Chrome, el navegador más popular del mundo. Según los reguladores, la integración de Google Search y Chrome es uno de los factores que limitan la competencia.
Entre otras propuestas — separación del sistema operativo Android de Search y Google Play Store. Ambas están instaladas por defecto en los dispositivos Android, pero en el segundo caso no está claro cómo funcionará el sistema, ya que Google Play es una tienda de aplicaciones para Android (el Ministerio de Justicia consideró anteriormente la posibilidad de una venta completa de Android, pero abandonó la idea).
El Ministerio de Justicia también recomendará al tribunal que se obligue a Google a conceder licencias de datos y combinar los resultados de búsqueda de Google sin restricciones. Bloomberg sugiere que esto permitirá a los motores de búsqueda de la competencia y a las startups de IA crear sus propios índices de búsqueda. Además, el gigante tecnológico se verá obligado a proporcionar más datos a los anunciantes, y estos podrán controlar mejor dónde se mostrarán sus anuncios.
También es posible que se prohíba a Google llegar a acuerdos de exclusividad similares al que tiene con Apple, que estipulaba que el motor de búsqueda de la compañía se convertiría en estándar para Safari (por lo que el gigante de las búsquedas pagó unos 20.000 millones en 2022).
Google está apelando la sentencia de monopolio del tribunal, mientras que el juez encargado del caso ha programado una audiencia de dos semanas para abril de 2025 — para discutir qué cambios debe hacer Google para eliminar el comportamiento anticompetitivo en las búsquedas. La decisión final está prevista para agosto de 2025.