Google acaba de firmar un acuerdo de compra de energía con la start-up de energía nuclear Kairos Power, con entrega a partir de 2030 y un despliegue de 500 MW en 2035.
La empresa está interesada en alimentar servidores de inteligencia artificial con electricidad libre de carbono, y como la competencia llama la atención sobre la energía nuclear. Las autoridades estadounidenses notó escasez de electricidad e iniciaron negociaciones con empresas tecnológicas para impulsar sus infraestructuras. Estos esfuerzos también están animando a las empresas a tomar más medidas.
No está claro en qué términos han firmado el acuerdo Google y Kairos — financiación directa o sólo compra de energía cuando todo esté listo. Kairos ya ha superado varias etapas en el camino hacia la creación de pequeños reactores modulares (SMR) y es una de las startups energéticas más prometedoras. La empresa fue la primera en recibir un permiso del regulador estadounidense para construir un reactor de demostración en Tennessee.
El mercado de los SMR es ferozmente competitivo -a pesar de que aún no se ha construido ningún reactor-, impulsado por la fuerte demanda de nueva capacidad de generación de energía de los centros de datos. El pionero nuclear Westinghouse también está trabajando en un reactor pequeño, fácil de transportar y desplegar, que produciría 5 MW durante ocho años.
Sin embargo, esta simbiosis de las dos tecnologías tiene ciertas vulnerabilidades. No se sabe a ciencia cierta cuánto durará el auge de la inteligencia artificial, cuyo procesamiento requiere mucha energía. Por otra parte, los SMR no han demostrado ser tan rentables y fáciles de operar como la energía nuclear tradicional. Como mínimo, al menos uno de estos reactores debería acabar siendo operativo.
Fuentes: The Keyword, Tom’s Hardware