Según un nuevo estudio, los impresionantes acantilados y las altas mesetas están causados por la misma onda que se eleva en la capa media de la Tierra cuando los continentes se separan.
Geólogos de la Universidad de Southampton (Reino Unido) han descubierto que las altas mesetas del interior de los continentes se forman por procesos que tienen lugar en las profundidades de la Tierra, a cientos de kilómetros de donde se formaron.
Thomas Gernon, autor principal del estudio, explica que la divergencia de los continentes desencadena una onda en el manto terrestre
Los científicos estudiaron tres escarpes costeros conocidos
Los investigadores estudiaron escarpes a lo largo de la costa de la India (Ghats occidentales), en Brasil (Altiplano) y la Gran Escarpa de Sudáfrica. Estos escarpes se extienden a lo largo de miles de kilómetros, y las mesetas interiores pueden elevarse un kilómetro o más.
El análisis de los datos minerales mostró que el levantamiento y la erosión de la meseta se produjeron simultáneamente con el movimiento de la onda del manto en las profundidades de la superficie. Este proceso fue extremadamente lento — la onda se movió sólo 15-20 kilómetros por millón de años.
Gernon sugiere que esta teoría podría explicar la formación de otras regiones con escarpes y mesetas, como en Carolina del Norte y del Sur o al sur de Camerún. Sin embargo, las formaciones más antiguas pueden ser menos visibles debido a la prolongada erosión.
Los investigadores han descubierto anteriormente que el mismo proceso de ruptura de supercontinentes y ondas del manto afecta también a la erupción de diamantes del centro de la Tierra.
Investigación publicado en la revista Nature.
Fuente: Livescience