
Un ucraniano de 23 años, Vyacheslav Leibov, sufrió un robo en Phuket, una popular isla turística de Tailandia. Ocurrió durante su visita a un amigo el viernes 8 de noviembre. La víctima transfirió a los delincuentes stablecoins de USDT por valor de más de 8,56 millones de baht (unos $249.000).
Según la víctima, el incidente ocurrió cuando acudió a casa de su amigo Alfred Chernyshuk, de 18 años, sobre las 22.45 horas. A la entrada, fue recibido por un conocido de su amigo, el ciudadano armenio Arman Grigoryan, de 21 años, que acompañó a Leibov a su habitación.
Al principio, Leibov habló con otros huéspedes en el balcón. Luego, cuando fue al baño, le esperaban dos hombres con la cara cubierta. Ataron las manos y los pies de la víctima con cuerdas y abrazaderas de plástico. A continuación, Arman, con un martillo en la mano, amenazó a la víctima con romperle los dedos, exigiéndole que transfiriera 500.000 Tether USDT en criptomoneda. El otro atracador ocultó su rostro y empuñó un largo cuchillo.
Según Leibov, consiguió persuadir a los asaltantes para que redujeran la cantidad del rescate. Tras la transferencia de 8,56 millones de baht (unos $249.000), los asaltantes le ataron a la cama, le advirtieron de que no acudiera a la policía, cogieron sus pertenencias y huyeron.
Más tarde, Leibov consiguió liberarse. Se dirigió a la recepción del hotel, donde averiguó que la habitación había sido alquilada por Armand y Alfred. Después se dirigió en moto al aeropuerto de Phuket, pero al no ver allí a ninguno de los sospechosos, acudió a la policía.
El 11 de noviembre, la policía encontró y detuvo a cuatro extranjeros sospechosos de haber robado a Leibov. La policía los identificó como el ciudadano armenio Arman Grigoryan, de 21 años, los ucranianos Alfred Chernyshuk (19) y Ruslan Musalev (22), y el ruso Miraz Atoyan, de 21 años. Los sospechosos fueron detenidos por la noche en el hotel Palm Inn, en el distrito de Takua Pa.
Curiosamente, el propietario del hotel declaró al canal de televisión local One 31 que vio cómo ataban a Leibov, pero pensó que se trataba de un vídeo de YouTube, ya que no oyó ningún ruido de forcejeo.
Según la policía, uno de los sospechosos compraba regularmente stablecoins USDT a Leibov y sabía que tenía una cantidad significativa de criptoactivos.
Fuente: The Nation, Bangkok Post
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