Cuando me haga rico, no se lo diré a nadie. Pero habrá señales.
El Tribunal de Distrito de EE.UU. acusó a 12 personas, tanto ciudadanos estadounidenses como extranjeros, de cuatro cargos de piratería informática en EE.UU. y en el extranjero. El importe total de los fondos robados supera los 243 millones de dólares. Varios sospechosos fueron detenidos esta semana en California, y es probable que otros dos se oculten en Dubai. Según el expediente del caso, la organización delictiva operó entre octubre de 2023 y marzo de 2025.
La mayoría de los acusados son veinteañeros. Gastaron 4 millones de dólares en clubes nocturnos y otros 9 millones en ropa de marca, alquiler de villas de lujo, guardias de seguridad y una flota de al menos 28 coches exóticos valorados entre 100.000 y 3,8 millones de dólares.
Los hackers pirateaban sitios web y servidores para obtener bases de datos de criptomonedas o las compraban en la darknet. A continuación, buscaban en las bases de datos a las víctimas más ricas. Las llamadas se hacían bajo la apariencia de superexpertos que supuestamente ayudaban a asegurar las cuentas. Blanqueaban la criptomoneda robada, canjeándola o realizando transferencias bancarias.
Los sospechosos utilizaban numerosos mecanismos de camuflaje, como cadenas de pelado, monederos proxy virtuales y VPN. En concreto, el 18 de agosto de 2024, Malone Lam estafó más de 4.100 bitcoins (unos 230 millones de dólares de la época) a una víctima de Washington D. C. Según el cripto detective ZachXBT, estos activos fueron robados al prestamista más tarde de la plataforma de criptomonedas en quiebra Genesis.
En otro caso, en julio de 2024, él y sus cómplices robaron criptodivisas por valor de más de 14 millones de dólares. El grupo también recurrió a los robos. En julio de 2024, Marlon Ferro, según los investigadores, entró en una casa de Nuevo México y robó una cartera de hardware mientras Lem seguía el paradero de la víctima a través de su iCloud.
Los acusados en el caso también se dedicaron al blanqueo de capitales cambiando criptodivisas por dinero en efectivo sin licencia, reservando vuelos privados, alquilando alojamientos de lujo con documentos falsos, matriculando coches caros con empresas fantasma y enviando dinero en efectivo por correo, ocultándolo en juguetes Squishmallow.
Fuente: Justice.gov, ZachXBT