Australia ha probado su primera arma láser capaz de derribar drones con gran precisión. Las pruebas tuvieron lugar en mayo en un campo de entrenamiento del ejército.
Según las Fuerzas de Defensa Australianas (ADF), el láser portátil de alta energía Fractl puede rastrear objetos del tamaño de una moneda de diez centavos que se mueven a una distancia de 1 km a una velocidad de 100 km/h. El sistema tiene potencia suficiente para quemar acero. Fractl fue considerado el láser portátil de alta energía más potente del mundo.
Esta arma láser es una pieza clave en los esfuerzos de las ADF por desarrollar su arsenal de vehículos aéreos contra aviones no tripulados. El sistema compacto, del tamaño de una maleta, ha sido desarrollado por AIM Defence, con sede en Melbourne. La empresa afirma que su láser Fractl utiliza el sistema óptico y de seguimiento más avanzado del mundo para garantizar la precisión en la puntería de los vehículos aéreos no tripulados. El rayo láser puede apuntar a componentes críticos del dron, como el rotor, el cableado y la cámara.
«Pulsas un botón para rastrear el dron y el ordenador se hace cargo, luego pulsas otro botón para «apretar el gatillo» como en un videojuego»», dijo el cabo Patrick Flanagan, de las ADF.
Con el dedo índice, el operador puede cambiar rápidamente la mira entre los componentes del dron. Se tarda unos segundos en dañar la cámara, y 2-3 segundos en dañar el rotor.
El sistema está diseñado para integrarse en estructuras existentes. Fractl es fácil de desplegar y ofrece opciones de alimentación por batería y CA. La unidad completa, lista para usar, pesa 50 kg, lo que la hace portátil y fácil de utilizar en diversos escenarios de trabajo. AIM afirma que el tamaño y peso del Fractl es una décima parte del tamaño y peso de otros sistemas láser disponibles en el mercado. También se dice que es una de las soluciones más rentables para la defensa contra drones.
Fuente: interestingengineering