Las fuerzas del orden italianas han confiscado consolas retro y videojuegos falsificados por valor de casi 50 millones de euros importados ilegalmente de China.
La policía descubrió que los dispositivos falsificados no cumplían las normas técnicas y de seguridad de la Unión Europea.
Entre los productos incautados había imitaciones de consolas clásicas de Nintendo, Sega y Atari. Tenían versiones pirateadas de juegos populares de los años 80 y 90, como Super Mario Bros. y Street Fighter.
Como resultado de la operación, la policía detuvo a nueve italianos y los acusó de tráfico de productos falsificados. Si son declarados culpables, los sospechosos se enfrentan a penas de hasta ocho años de prisión. Todos los juegos falsificados incautados fueron destruidos.
Alessandro Langella, Jefe de la Unidad de Delincuencia Económica de la Policía Financiera de Turín, declaró:
«Nos hemos incautado de aproximadamente 12.000 consolas con más de 47 millones de videojuegos pirateados almacenados ilegalmente en ellas. Su valor estimado supera los 47,5 millones» de euros.
Según él, esta cantidad cubre el coste de las consolas y cientos de licencias de software pirata.
En los últimos años, los juegos retro se convirtió en un negocio rentable. Los juegos y consolas clásicos se venden a menudo por cientos o incluso miles de dólares. Esta tendencia ha provocado un aumento de la demanda de productos retro, lo que ha creado condiciones favorables para los defraudadores.
Fuente: videogameschronicle