Según las fuentes, Microsoft está gastando 1.000 millones de dólares para garantizar que los juegos de terceros estén disponibles en Xbox Game Pass. Entre las empresas con las que hemos firmado contratos multimillonarios figuran muchas marcas conocidas.
Según Bloomberg en un extenso artículo sobre Xbox y los ejecutivos de la división de juegos de la empresa, Microsoft ofrece a los pequeños estudios una tarifa plana de muchos millones por adelantado para añadir sus títulos al servicio de suscripción, con lo que obtienen una parte de los ingresos por suscripción y acceso a un mercado mayor.
La empresa depende en gran medida de Game Pass, sobre todo teniendo en cuenta la situación actual. En medio de la caída de ventas de las consolas Xbox y los lanzamientos de juegos poco exitosos, Game Pass se ha convertido en la principal «arma» de Microsoft.
La compañía también se ha asociado con algunos editores importantes para añadir sus juegos a la suscripción. Entre ellos están Ubisoft, EA y Rockstar con la franquicia GTA. Pero a pesar de los esfuerzos y los importantes costes, el crecimiento se está ralentizando. Se espera un estancamiento incluso con juegos como Call of Duty: Black Ops 6 que llegarán en el futuro, Indiana Jones y S.T.A.L.K.E.R. 2.
Uno de los datos interesantes de los que también informa Bloomberg es la distribución porcentual de los jugadores en Estados Unidos Según la publicación, la mitad de los jugadores de Estados Unidos son mujeres. Además, a pesar del importante porcentaje de afroamericanos y latinos en la sociedad, el 75% de los jugadores son blancos. Este año Microsoft ya ha reducido más de 2650 puestos de trabajo en el sector del juego, aproximadamente una cuarta parte de estos recortes anunciado a mediados de septiembre. Según las fuentes, su división de juegos opera con estrictos márgenes de beneficio.